Una nueva visión de este mundo.

Ayer sentada bajo un árbol, callada, pensativa, pude admirar la belleza de la naturaleza.
Las hojas violetas del árbol se movían al son del viento, un rayo de sol atravesó las hojas, iluminó mi cara y un calor apetecible recorrió todo mi cuerpo. 
Alcé la vista al cielo, unas nubes esponjosas decoraban un cielo azulado.
Una mariposa blanca pasó en frente mía y una sonrisa idiota cubrió mi cara. Solo se podía describir ese sentimiento como: paz.  
En ese instante dejé de pensar que este mundo es una mierda, cambié de parecer, es cierto que hay personas que no valen la pena pero esta vida sí, vale mucho más que algunas personas.